Es una típica cantina italiana para ...
Es una típica cantina italiana para quien busca comida bien casera y abundante pero no se destaca en ambientación, aunque con la comida que hay es lo de menos. En efecto, ofrece una amplia oferta de pastas de muy buena calidad, a precios más que razonables para estar en Buenos Aires. El ambiente es un poco ruidoso y bien de barrio, pero cumple con la finalidad de comer bien y relativamente barato. Además, ofrece el servicio de estacionamiento gratis.
Fuimos 6 y gastamos $160 (más o menos 32 euros) y pedimos una media picada que era muy muy abundante y una porción de rabas de entrada; de plato principal yo pedí unos ravioles caseros(con ricota, jamón y nuez) con salsa scarparo que estaban riquísimos, Ro unos sorrentinos capreses que también estaban muy buenos y los otros cuatro medio kilo de Fusilli al fierrito con brócoli que eran una delicia.