Tazones

¿Qué se puede decir de Tazones que no se haya dicho ya? Este pueblecito costero previo a Villaviciosa se halla en la base de un acantilado.
Importante puerto ballenero, cobró importancia a principios del siglo XVI porque aquí desembarcó en 1517 el joven rey Carlos I de España y V de Alemania la primera vez que llegó a España procedente de Flandes.
Este pueblo es famoso por tener varios restaurantes que sirven todo tipo de productos marinos, principalmente crustáceos como llámpares, centollos, almejas o percebes.
Desde el final del espigón se puede ver el final de la ría de Villaviciosa e incluso la cercana playa de Rodiles.

En el concejo de Villaviciosa y a orillas del Mar Cantábrico, se esconde este bello pueblo marinero, un pequeño lugar en el cual disfrutaremos de grandes experiencias.
Aquí desembarcó Carlos V en su primer viaje a España el 19 de septiembre de 1517.
Tiene un encanto especial, ya que combina el ambiente de los puertos pesqueros y la cercanía de los montes asturianos.
Su gastronomía es una delicia, con sus pescados y mariscos de primera, entre el olor a sidra en el ambiente, y sus platos cocinados con gran maestría por sus habitantes, por estás y otras razones
merece la pena ir a este pintoresco puerto de mar que ademas, ostenta el titulo de Conjunto Histórico Artístico del Principado de Asturias.

Tazones es un antiguo pueblo marinero donde dicen que desembarcó Carlos V en 1517 para tomar posesión del trono de España, aunque a decir verdad, es más conocido por su encanto y su afamada gastronomía. Está escondido entre frondosas colinas al final de la ría de Villaviciosa, y mira a una bahía de aguas increíblemente transparentes. Sus casas de arquitectura popular construidas en desniveles, sus calles empedradas, sus hórreos ubicados casi sobre la playa, y esa combinación de mar y monte, enamoran a primera vista. La villa que fuera una vez enclave ballenero, hoy se centra en su pequeño puerto, en la lonja de pescado y en sus cetáreas de marisco.

Tazones se sitúa en la costa del concejo de Villaviciosa, en la desembocadura de la ría del mismo nombre, a unos 11 km de la capital del concejo. Tiene una playa en cuyo pedrero pueden observarse huellas jurásicas de dinosaurio. También cuenta con uno de los 18 puertos pesqueros de Asturias, perteneciente a la capitanía de 3ª de Lastres, en el que atracan pequeñas embarcaciones dedicadas a la pesca de bajura y una lonja de pescado. El pueblo se sitúa entre dos grandes peñas, y sus casas, de uno o dos pisos, se disponen de forma escalonada. Importante puerto ballenero en épocas pasada.
Todo

Un lugar para estar relajado cuando llega la tarde después de recorrer la costa asturiana de oeste a este y vuelves a casa pero ya no puedes más y decides que es mejor tomar un respiro y oler el aire fuera del coche. Te bajas, miras a tu alrededor y te encuentras con ésta vista... Y, por lo menos a mí, me encantó, cinveramente.

Precioso pueblo de pescadores donde solo hay restaurantes jejeje en verano se llena de turistas pero tiene un encanto...
Tiene una mini playa ke empleamar desaparece pero el puerto forma una baia excepcional para la practica del kayak