Una experiencia cultural emocionante
Descubrir el Teatre del Raval de Gandia ha sido toda una sorpresa. Hacía algunos años que pasaba algunos días en esta ciudad cuando aún la temporada alta no ha llegado. El clima amable del Mediterráneo permite que también durante los meses del otoño, el invierno y la primavera se pueda disfrutar de ella. Además, el enclave de Gandia, entre montañas, la marjal y a los pies del Mediterráneo hacen de tu paso por esta ciudad algo más que una mañana de tumbona, sol y playa.
El Teatre del Raval es un superviviente con más de 30 años de historia. Cuentan con una programación regular, de octubre a junio, en la que ofrecen espectáculos autóctonos y también de otros lugares. En su sala puedes ver espectáculos de circo, marionetas, ciclos de cine, conciertos de música muy diversa, teatro y danza. Apuestas en ocasiones arriesgadas y, por ello, distintas a lo que comúnmente suelen ofrecer otro tipo de salas más comerciales.
Atraída por ese perfil en su oferta cultural me acerqué al Teatre del Raval y me enamoré desde el minuto cero del espacio, de su ubicación en un barrio con historia y de su trayectoria. El servicio fue muy bueno. Profesionalidad y calidez, cercanía, me gustó.
Aunque ofrecen espectáculos mayoritariamente en valenciano, también hay espacio en su programación para otros en castellano... e incluso en inglés. Yo vi uno en valenciano y me encantó. ¡El arte es así! Viví una Gandia distinta y se abrió ante mí una visión de la ciudad que hasta ahora desconocía: la Gandia de sus barrios, en la que laten iniciativas culturales alternativas como la de este teatro.
Por último, destacar que el Teatre del Raval se encuentra a unos metros de la Plaza del Prado, donde una puede tomarse tranquilamente una cerveza o un refresco al finalizar el espectáculo y coronar así el paso por la Gandia ciudad que tan desapercibida pasa para la mayoría de los turistas que no salen de su playa.
!Lo recomiendo! Su web:'https://www.teatreravalgandia.org'
