Teatro digno
A mediados del siglo XIX se comenzó a gestar la idea de edificar un teatro digno para los habitantes de Guadalajara; y así el 5 de marzo de 1855, bajo el gobierno de José Santos Degollado, se colocó la primera piedra.
La construcción y el diseño del inmueble estuvo a cargo del arquitecto tapatío Jacobo Gálvez. Luego de once años de obras el edificio abrió sus puertas con el nombre de Teatro Alarcón, en honor al dramaturgo mexicano Juan Ruiz de Alarcón y Mendoza. Posteriormente se optó por cambiar el nombre de teatro por el actual en honor a su principal promotor.