Vistas inmejorables
En la cúspide del Hornisgrinde, en medio de una meseta que forma la zona "pantanosa" (Hochmoor)del Grindenpfad, se levanta una torre de señal de 7 metros, construida alrededor de 1840. La torre sirvió como torre de vigilancia hasta la Segunda Guerra Mundial.
Actualmente es otro de los atractivos de la montaña más famosa del Parque Natural y desde el 2000, año en que fue renovada, la torre de Bismarck es accesible gracias a su escalera de caracol lateral.
En días claros, desde su mirador, se aprecian los oscuros y frondosos horizontes de la Selva Negra. A nuestros píes se contempla el original y bello paisaje de tundra y marisma. En su base, un divertido cartel nos recuerda el importante cruce de caminos que supone esta zona, ya que a pocos kilómetros se encuentra la vecina Francia y ciudades como Estrasburgo se dejan ver a lo lejos...