Restaurante familiar ecológico
Éste restaurante se inauguró en 1933. La familia que lo lleva ahora lo adquirió en el 2003 y tuvo que enfrentarse al huracán Katrina, que les obligó a cerrarlo durante varios meses.
Ahora el restaurante mantiene el mismo aspecto retro-familiar de antes, pero ha incorporado una filosofía mucho más “verde” a su carta.
En la parte de atrás del restaurante, han construido un huerto del que obtienen las hierbas y la mayoría de las frutas y verduras que utilizan en sus platos. Además, tienen huevos frescos cada día, cortesía de las gallinas que viven en su corral. Los productos que no cultivan en el huerto, normalmente los consiguen por medio del intercambio con otros granjeros de la zona. Con los residuos que generan, producen el abono para sus terrenos. Pero lo que más me sorprendió fue lo que hacen con el aceite usado: ¡lo combierten en combustible allí mismo! En la parte trasera de la cocina tienen una manguera desde la que llenan directamente sus coches. Creo que no se puede ser más verde que esto...