GERARD DECQ
Sencillo y agradable
Nos alojamos en este hotel en Nápoles, que está bien situado y a buen precio. Es sencillo y muy acogedor, además, cuenta con calefacción para cuando hace frío. Fue donde comimos el mejor gnocchi en Italia ¡costó 5 euros! Estaba delicioso y la ración era para dos personas, pero pedimos una para mí y una para mi hermana. Incluye desayuno, cosa rara en Europa, a pesar de ser sencillo. Muy buen servicio.