Incluida en la Ruta Románica por su fantástico conjunto histórico artístico, Orense es una ciudad gallega con una increíble arquitectura monumental. Sus construcciones nos llevarán por distintas épocas, pasando por la medieval, renacentista, barroca y modernista. También es famosa por sus excelentes manantiales de aguas termales que forman la Ruta Termal del Miño. Mucho turismo en Orense se debe a que forma parte del Camino de Santiago, y el peregrino encuentra en esta ciudad un importante soporte con albergues para proseguir con la ruta. Por otra parte, otros viajes a Orense tienen como objetivo el Complejo Arqueológico Natural de Santomé, donde el visitante se deslumbrará con las imponentes vistas de la ciudad.
Para conocer Orense tendremos que recorrer las dos zonas en las que está dividida la ciudad por el río Miño: la zona centro y el Barrio del Puente. El casco antiguo luce un estilo medieval y en él encontramos algunos de los monumentos más emblemáticos. Un ejemplo es la Catedral de Orense, en honor a San Martín. Es el principal monumento religioso de la ciudad, edificado a mitad del siglo XII. Caminando por la ciudad el visitante encontrará un gran número de puentes de diversos estilos, pero de entre todos destaca el Puente Romano, uno de los más famosos y antiguos. Otro puente que es considerado como un auténtico símbolo es el Mayor, que cruza el río Miño y data del siglo I.
Viajar a Orense puede ser una gran opción si quieres regocijarte en Las Burgas, manantiales de aguas termales con propiedades medicinales muy beneficiosas para la piel, de donde brotan aguas de hasta 68ºC.
Para visitar Orense al completo se recomienda pasear por sus calles repletas de arte con una carga de historia inigualable rodeado de un bello entorno natural. Los amantes del turismo activo podrán realizar varias rutas, desde la monumental Ruta Románica hasta la de los famosos manantiales de la Ruta termal del Miño, muy apta para disfrutar en familia.