Los espacios naturales son la principal razón por la que hacer turismo en Molinicos. La Sierra del Segura ofrece a los viajeros un sinfín de posibilidades para disfrutar de unos días en verdadero contacto con la Naturaleza. Dentro de sus límites se encuentra el Parque Natural de los Calares del Río Mundo y de la Sima, donde es un placer caminar por su valles y el curso del Mundo, poblado por un bosque de pinares.
Para los que están acostumbrados a caminar llegar hasta el Embalse de la Fuensanta, a diez kilómetros de distancia, puede ser un agradable paseo que terminar con un baño. Si el día no acompaña para bañarse, El Bujero, es otro de los lugares que visitar en Molinicos, un monumento natural de roca horadada por el efecto del viento.
También el centro de la ciudad guarda innumerables tesoros. Hacer turismo en Molinicos es imprescindible. En su ruta por la zona más urbana, el viajero encontrará edificios de todas las épocas y estilos, como la Atalaya de Torre-Pedro o el Castillo de la Vegallera o el mismo Castillo de Molinicos –de orígenes remotos-, la Iglesia de San Pablo o las más modernas Iglesias de San Vicente y la Iglesia del Carmen, ya del pasado siglo XX.
Si estás organizando tu escapada a la localidad manchega, debes tener en cuenta que sólo se puede viajar a Molinicos por carretera. Si no vas a desplazarte en coche, una buena idea es volar hasta el aeropuerto de Albacete, o sino viajar en tren hasta alguna localidad cercana como Hellín, que dispone de estación de tren.
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