Sant Jordi de Ses Salines

Cerca de la capital de la isla de Ibiza, en el Parque Natural de Ses Salines, se encuentra en su camino el viajero está pequeña localidad dedicada desde hace siglos a la extracción de sal. Un pueblo en el que brilla el blanco de la sal y el de las casas encaladas, viajar a Sant Jordi de Ses Salines es una oportunidad única para conocer la esencia de los pueblos de la isla balear.

Al hacer turismo en Sant Jordi de Ses Salines llama la atención del viajero el aspecto de aldea, de pequeño pueblo que todavía conserva la localidad. Es un lugar lleno de encanto, en el que merece la pena visitar su Iglesia fortificada.

Además al estar tan cerca de las playas de en Bossa o Sa Caleta el turismo en Sant Jordi de Ses Salines es una actividad muy importante para la ciudad, especialmente durante los meses de verano, en los que llegan cientos de turistas venidos de todos los rincones del planeta.

Los sábados es un buen día para visitar Sant Jordi de Ses Salines, pues se celebra por la mañana un mercadillo en el que podemos encontrar de todo: ropa, artesanía, artículos de segunda mano, etc.

A la hora de viajar a Sant Jordi de Ses Salines, cuentas con la ventaja de que la localidad se encuentra a menos de cuatro kilómetros del aeropuerto. En la actualidad es el municipio más cercano al terminal aéreo, por lo que al aterrizar sólo necesitarás unos minutos para llegar a tu destino.

Si ya te has decidido a conocer Sant Jordi de Ses Salines, no dudes en organizar tu escapada a través de minube, donde encontrarás todo lo necesario para tener unas vacaciones perfectas: viajes baratos a Sant Jordi de Ses Salines, alojamientos y rincones recomendados por otros viajeros…