Viajar a Braganza es zambullirse en un mundo que no parece pertenecer a este nuestro en el que vivimos. La ciudad portuguesa se presenta al viajero más bien como sacada de dentro de un cuento de hadas. Bella, misteriosa, de piedra y enredaderas, es un bonito rincón del Norte de Portugal en el que perderse unos días.
El Castillo es el principal foco del turismo en Braganza, además de ser todo un emblema de la ciudad, configurador de la urbe y, especialmente, una parte muy importante de esa personalidad legendaria que tiene la localidad. Sus piedras, muros y almenas, han dado lugar a ese carácter que permanece inamovible desde hace siglos y que ha dado lugar a la leyenda de la ciudad. Construido como fortaleza, hoy hace las delicias de pequeños y mayores con su museo militar.
En una ruta de turismo por Braganza , no puede faltar tampoco una visita a otros lugares destacados, como son el Ayuntamiento o la Iglesia de Santa María. Rincones llenos de encanto, que están también imbuidos por esa atmósfera medieval que baña cada resquicio de la ciudad.
Además en las afueras de la ciudad, hay también lugares llenos de encanto dentro del Parque Natural de Montesinos, uno de los sitios más interesantes que visitar en Braganza en el que sentirse en contacto con la Naturaleza. Si vas a pasar varios días en el municipio, no dudes en salir a hacer una ruta a pie o en bicicleta, perderse en sus caminos es un verdadero placer.
Si estás preparando tu escapada a este mundo mágico que es la ciudad portuguesa, tienes que saber que para viajar a Braganza, lo mejor es tomar un avión hasta alguna de las grandes ciudades más cercanas, como puede ser Oporto, pues desde su aeropuerto sólo salen vuelos regionales. Puede consultar en minube cuáles son las mejores combinaciones, además de poder encontrar ofertas para viajar a Braganza, en la fecha en que desees.